Pasta para suavizante

Descripción

También conocida como base concentrada para suavizantes textiles, es una materia prima de textura pastosa y color blanco o blanquecino, diseñada para la elaboración de suavizantes líquidos para ropa. Contiene una mezcla de emulsionantes catiónicos, espesantes, y, en muchos casos, modificadores reológicos, que permiten obtener un producto final estable, viscoso y efectivo para acondicionar las fibras textiles.

Actúa depositándose sobre los tejidos durante el enjuague, reduciendo la fricción entre fibras, aportando suavidad, volumen, y facilidad de planchado, además de ayudar a fijar la fragancia en las telas.

Propiedades generales:

• Estado físico: Pasta espesa, cremosa

• Color: Blanco a blanco lechoso

• Olor: Neutro o ligeramente característico

• Naturaleza química: Catiónica (generalmente a base de compuestos tipo quaternary ammonium)

• Solubilidad: Dispersable en agua caliente con agitación

• pH típico: 4 – 5.5 (en solución)

• Concentración de uso: 5% – 20% dependiendo del tipo de suavizante deseado

Funciones principales:

1. Base activa para suavizantes líquidos para ropa

2. Acondicionamiento de fibras textiles

3. Reducción de la fricción entre las telas

4. Facilita el planchado y mejora la textura

5. Ayuda a la fijación de fragancias

6. Proporciona cuerpo y viscosidad al producto final

Aplicaciones comunes:

• Suavizantes líquidos concentrados o diluidos

• Suavizantes con fragancia encapsulada

• Suavizantes con acción antiestática o con efectos especiales

• Fijadores de perfume para ropa

• Productos de línea hogar o institucional

Ventajas del producto:

• Fácil de diluir y formular

• Compatible con esencias, colorantes, conservantes y activos adicionales

• Proporciona suavidad duradera

• Permite crear suavizantes económicos o premium según la dilución

• Buen desempeño en todo tipo de telas

• Puede combinarse con siliconas, fragancias microencapsuladas, entre otros aditivos

Consideraciones de uso:

• Requiere agitación constante durante la dilución, preferiblemente con agua caliente (~60 °C)

• Ajustar pH al final (ideal entre 3.5 y 5.5)

• Agregar conservante para garantizar estabilidad microbiológica

• Puede espesarse demasiado si se diluye incorrectamente (usar sal u otros modificadores con precaución)

• Almacenar en lugar fresco, seco y fuera de la luz solar directa